martes, 23 de julio de 2013

Me apetece

Me apetece escribir sobre el pasado viernes.

Lo que iba a hacer distinto ese viernes era que tenía que ir a Barcelona a por unas personas. No tenía que llegar el mismo viernes, por lo que más relajadamente empecé a pensar en las opciones que tenía. La que más me motivaba era la de dormir en el camino, ya que estaría ya en marcha y podría aprovechar para ver y descansar en la naturaleza. ¡No era mala idea despertarse escuchándola!

Para ello, al mediodía tenía que preparar la maleta, coger algo de comida para el camino, hacer la compra de la semana (para la vuelta) y montar la furgoneta.

Tenía 4h30’ para hacer todo eso; el tiempo suficiente.

El jueves por la noche me llamó una amiga para hablar sobre un tema que le estaba preocupando, sobre el que hablaríamos el viernes al mediodía por su urgencia. Éste fue el primer cambio en los planes. Había que adaptar lo pensado, aunque todavía no sabía como.

Decido ir haciendo sobre la marcha lo premeditado  y ver como voy de tiempo para cada cosa y adaptar.

El segundo cambio vino al estar montando la furgoneta: una de las luces estaba fundida. Tenía que poner una nueva para el viaje.

Se supone que cambiar las luces es algo sencillo (menos en algunos coches) y probé a hacerlo, me apetecía hacerlo por mí mismo y experimentar. ¿Por qué no?

Más o menos sabía como se hacía. Quité una de las luces, pero no era la fundida, me equivoqué. J. Quité la que era y ví que no tenía de repuesto (poco previsor).

Ya era un poco tarde, así que adapté el horario y decidí unir la compra de comida con la de las bombillas (para tenerlas ya a mano la próxima vez) en el mismo lugar, un centro comercial con una tienda de accesorios de coche al lado. (Hay que aceptar que a veces vienen muy bien). Buscar soluciones que simplifiquen nuestras necesidades.

Después de hablar al mediodía con la amiga, trabajar y hacer las compras pertinentes, llego a casa. Ya son las 22:30. Empieza a hablar esa vocecilla que nos dice que las cosas son imposibles, que es tarde, que mejor haces mañana, que no vas a poder…

Sigo haciendo. Pongo la compra en su sitio. Preparo la cena. Empiezo a hacer la maleta. Ceno. Pongo el Tour mientras ceno y… ¡Etapón! Me engancho a la gran etapa de ese día que no pude ver.

Y empieza el conflicto entre mis deseos y mis voces internas: “vamos, a la furgo y en marcha”, “no, no, quédate descansando y sales mañana”, “es muy tarde”, “te despertarás con el sol, entre árboles, junto al río…”, “te va a entrar el sueño”…


Y me acordé de la frase que dice un amigo y cliente mío que me ayudó a conectar con mi parte que más quería ser escuchada: “Si quieres tener un año en el que des el 100%, tienes que empezar desde el principio a dar ese 100%” (Gracias Ion. La foto también es tuya, me gusta)

Era un poco tarde, pero mi cuerpo y mi mente querían despertarse en otro lugar, ya en marcha, en camino y viviendo ese 100% con el que llevaba todo el día. Y Para ello, tenemos que salir de esa zona cómoda, de confort, y dar un paso adelante. Sabemos qué es lo que queremos y lo que nos llena, qué hace que estemos en ese 100%, en esa plenitud, haciendo lo que nos equilibra.

Yo ese día lo tengo como el día que volví a ser consciente de ese 100%. De haber vivido ese día, aprovechado cada momento.

¿Cuánto estas dando tú hoy de ese porcentaje?

Y, ahora mismo, ¿qué te ayudaría a darlo?






Pues… si lo quieres, ¡vamos a por ello!

1 comentario:

  1. Hola Mikel, soy Carlos Estella, conocido de tu hermano Aitor y kayakista mañico del Pirineos Kayak. Le escribí a Aitor hace unos días para que me contara algo del kayak surf, quiero hacer algún cursillo de iniciación ahora en Agosto, pero no me ha contestado, no tengo su teléfono y los colegas que lo tienen andan por ahí de viajes.... si me pasas algo de información, contactos, etc. te lo agradecería (carlos.estella.zgz@gmail.com) Un saludo!

    ResponderEliminar